Reseña de Abad (2009) Traiciones de la memoria

Review of Abad (200) Traiciones de la memoria

Entre la Investigación y la Memoria. Tras la ruta de Borges

Desde El Olvido que Seremos, otra obra de Héctor Abad Faciolince, el autor define una ruta para pensar los recuerdos y construir el relato de lo cotidiano. Este título proviene de un poema que el autor encontrara en un bolsillo de su padre cuando fue asesinado; ese fue el final de El Olvido que Seremos, y el comienzo de Traiciones de la Memoria. El Olvido que Seremos hacía parte de ese poema escrito en un papel doblado para que tuviera espacio en un bolsillo, y se convirtió en el título de un libro. Un título no menos controversial por la ironía de la frase, sino por el posible autor de la misma, hecho en el que Abad señala que no reparó en un primer momento. El papel doblado en el bolsillo no citaba autor alguno más allá de algunas iniciales, omitidas por Abad Faciolince hasta que fue acusado de utilizar fragmentos de un texto de Borges para titular su libro.

De esta manera Traiciones de la Memoria se convierte en un texto que sigue la ruta de otro texto, en un diario de campo, en una reflexión sobre la memoria, su construcción y su devenir.

El libro es un diario de campo ideal para entender y comprender las rutas de la investigación cualitativa. El autor relata de una manera detallada en momentos y general en otros, la ruta que se trazó para seguir los rastros de la posible autoría del poema doblado en el bolsillo de su padre. Se trata de una bitácora de investigación que ilustra claramente el seguimiento de pistas, la construcción de hipótesis, la búsqueda de fuentes y el trabajo colaborativo. Traiciones de la Memoria es la memoria de un proceso de investigación que llevó al autor a través de 14 ciudades en 11 países, más de 20 fuentes primarias y cientos de documentos. Toda la ruta investigativa se realizó sólo para concluir acerca de la autoría o no de un poema, saber si fue escrito por Borges, o quizá dictado por él. Para estudiosos y amantes de la investigación cualitativa y la forma en que se podrían redefinir los informes, se trata sin dudas de un texto maravilloso narrado desde lo literario pero con la rigurosidad del conocimiento académico.

Sin embargo, es posible que el autor no se haya preocupado por escribir un libro acerca de la investigación, pero sí un reporte de seguimiento de pistas, lo cual es razonable dados los detalles acerca del devenir de las memorias a través de su proceso de búsqueda. Es en el desarrollo de apuntes sobre la memoria que el libro tiene agencia propia, al menos desde la pluma (¿teclado?) del autor. La argumentación acerca de este proceso en relación con datos, lugares, nombres, objetos sustenta una vez más la idea que la memoria se desarrolla y construye en el entre nosotros y no en el intra yo. Además, en el transcurso de su búsqueda por un autor concluye la existencia de memorias en contraste con las versiones de contenidos unificados, reales y verdaderos. El lector define esta condición apenas inicia el Prólogo, que en sus primeras líneas dice: “Cuando uno sufre de esa forma tan peculiar de la brutalidad que es la mala memoria, el pasado tiene una consistencia casi tan irreal como el futuro”.

Traiciones de la Memoria es el relato de los recuerdos de Abad Faciolince y de todos los que le ayudan o distraen en su propósito por verificar si el poema en el bolsillo de su padre tenía por autor a Borges, de quien el autor dice en un apartado del texto: “Como decía el mismo Borges, y es un hecho supongo que neurológico de la memoria, recordamos las cosas no tal como ocurrieron, sino tal como las relatamos en nuestro último recuerdo, en nuestra última manera de contarlas” (p. 149). Cada encuentro con expertos, amigos, aficionados de Borges y de su obra supuso para Abad el desenvolvimiento perfecto de esta sentencia. Y he aquí otro atractor presente en el libro: la construcción de un relato acerca de las características esenciales de la obra del literato argentino en función de quién hable del tema. El relato señala la diversidad de comprensiones que hacen imposible un único rompecabezas acerca del autor. En función del ángulo de la mirada y del contacto con aquello que convoca, Borges, la versión y comprensión es diferente, lo mismo que los contenidos de la memoria y sus traiciones.

La literatura ratifica en este caso que a través del arte, de la narración y de la indagación se integran diversos temas, que en función del lector adquieren una u otra comprensión. Memorias, Borges e Investigación son por lo menos tres de las invitaciones que nos hace el autor en Traiciones de la Memoria.

“La verdad y el olvido están siempre salpicados de olvidos o deformaciones del recuerdo que no se reconocen como tales” (p. 141).