Reseña de Law (2004) “Afther Method”

Review of Law (2004) “Afther Method”

  • Daniel López
Portada libro

Law, John (2004).
After Method: mess in social science research. London: Routledge.
ISBN: 0415341752



After Method es un libro que cumple dos objetivos importantes: en primer lugar, sintetizar toda una trayectoria de investigación en el campo de los estudios sociales de la ciencia y la tecnología desde una óptica materialista relacional (Actor-Network Theory); y en segundo lugar, desarrollar a partir de este bagaje una propuesta metodológica (diría una práctica de investigación) sensible a la heterogeneidad e indeterminación de lo social. Tal y como él mismo dice el objetivo es: 'to begin to imagine what research methods might be if they were adapted to a world that include and knew itself as tide, flux, and general unpredictibility'

Ahora bien, John Law trata de evitar que su lección se asemeje a una discusión epistemológica sobre el método en términos puramente formales. Aplicando sobre sí los hallazgos de los estudios sociales de la ciencia y la tecnología (fundamentalmente la idea de ciencia en acción) el método es abordado como práctica. Una práctica guiada pero en ningún caso ajena a los materiales que la componen, las constricciones discursivas que la estructuran o los emplazamientos que le van dando forma.

“To do this we will need to unmake many of our methodological habits, including: the desire for certinty; the expectation that we can usually arrive at more or less stable conclusions about the way things really are; the belief that as social scientists we have special insights that allow us to see further tahn others into certain parts of social reality; and the expectations of generality that are wrapped up in what is often called 'universalism'. But, first of all we need to unmake our desire and expectation for security.”

En este sentido, el método que defiende John Law es totalmente heredero de los planteamientos constructivistas: afirmar que la realidad es construida no implica negar su validez. Que algo sea independiente no contradice el hecho de que sea construido. Es decir, el método es una operación a través de la cual los científicos sociales definimos los objetos que estudiamos. Ahora bien, este método no es un constructo subjetivo, una operación de un yo que trata de conocer el mundo. El método es más bien un hinterland. John Law recurre a este concepto de difícil traducción para poner de manifiesto la heterogeneidad del propio método y su condición impura. Un hinterland es la región que soporta económicamente (y logísticamente) un determinado núcleo urbano. Así, mientras el núcleo es visible y puede delimitarse, el hinterland acostumbra a permanecer en el trasfondo y sus limites son difícilmente discernibles. Definir el método como hinterland es una manera de incluir en la reflexión metodológica todos aquellos aspectos que tradicionalmente son segregados y ocultados en la investigación: los condiciones materiales, las asunciones ideológicas y las precomprensiones.

“We need a way of talking that helps us to recognise and treat with fluidities, leakages and entanglements that make up the hinterland of research. This would allow us to acknowledge and reflect not only on what happens in laboratories or in the offices of social scientists, but also in the missing seven-eights of the iceberg.”

El problema con el método es justamente que ha operado como búnker frente a estas cosas. El método es un corte sobre el hinterland. Una forma de invisibilizarlo. John Law, recuperando el pensamiento de Deleuze, propone la idea de method assamblage para evitar esto. Este concepto le permite pensar el método como surgido y a la vez creador de hinterlands que van transformándose y que al mismo tiempo permanecen difusos y volátiles.

Muy esquemáticamente, ésta es la propuesta metodológica que nos ofrece John Law. Sin embargo, gran parte del interés de este libro está en el modo en el que este method assamblage se pone en práctica para estudiar fenómenos y sucesos muy diversas: la corporeización de la arteriosclerosis en un hospital de Holanda, la expansión y uso de la bomba de agua en Zimbawe, la puesta en marcha programa de diagnóstico cervical del Reino Unido o una choque de trenes cerca de Londres. A través de un relato en el que se entrelaza de manera muy pedagógica y amena empiria, un gran repertorio de anécdotas y diferentes teorías propias de los estudios sociales de la ciencia y la tecnología nos muestra como la práctica del method assamblage implica siempre exponerse al desafío de la incertidumbre y de lo múltiple. Supone, de hecho, una relación cuidadosa con aquello que estudiamos: que seamos sensibles a los mecanismos por los cuales algo es ausentado o presentado, purificado o hibridado, localizado o globalizado. En eso consiste, según él, hacer ciencia social. Y por este motivo, la ciencia implica siempre una ontología política: constituir el mundo de un mundo concreto y al mismo tiempo abrir la posibilidad a otros mundos posibles. Dado que el método es un hinterland que activa/desactiva determinadas realidades (las sustenta o las transforma), pensar sobre el método implica pensar sobre las realidades que queremos. Pero no en el sentido de 'escoger' una realidad, de tomar partido por una realidad u otra, sino en el sentido del “interesamiento” de Stengers (estar concernido o implicado en algo). Ese es el carácter ético y político del método.